Opinión- marzo de 2022
Por: Laura Daniela Ramírez Bueno
Abordar la corrupción desde una perspectiva de género y diversidad sexual e identitaria implica retos tales como: establecer la relación existente entre corrupción, derechos humanos y género; establecer los riesgos, impactos y necesidades específicas de las mujeres, niñas y personas de sectores LGBTIQ+ en clave de lucha contra la corrupción; identificar víctimas individuales y colectivas afectadas de manera concreta y tangible por la corrupción, avanzando en diagnósticos de daños individuales y colectivos por su causa; aproximar o proponer medidas de reparación integral, especialmente orientadas en las garantías de no repetición y prevención de actos de corrupción; y, finalmente, posicional en la agenda pública la necesidad de abordar la lucha contra la corrupción y por la transparencia desde un enfoque de género y diversidad sexual e identitaria.
Para Transparencia por Colombia (TPC), avanzar en la comprensión de estas posibilidades en la lucha contra la corrupción partió desde la investigación científica, evidenciando algunos escenarios que confirman la existencia de esta relación especialmente sobre las mujeres. Por ejemplo, en materia del acceso a bienes, servicios públicos, goce de derechos fundamentales e inclusive escenarios de prevención de violencia policial y/o abuso de autoridad que se encuentran atravesados por situaciones de sobornos de diferente índole. En este último caso, documentando el impacto también a población con orientación sexual o identidad de género diversa. La carencia de información que aborde la relación anterior en América Latina y el Caribe, principalmente en Colombia, profundiza los retos para la comprensión de cómo son afectados de manera diferencial por la corrupción. Este panorama evidenció la importancia de indagar casos concretos para reconocer escenarios de riesgo, así como identificar los daños diferenciados de la corrupción para las personas con orientación sexual e identidades diversas.
Así las cosas, desde TPC se buscó ampliar este escenario con la finalidad de identificar los casos de corrupción particulares que afectan a mujeres y personas con orientación sexual e identidades diversas; reconocer los daños diferenciados, y sus consecuencias en la dignidad y el proyecto de vida para estos grupos poblacionales; y realizar una aproximación a las posibles formas para prevenir y garantizar medidas de no repetición. Para esto, se abrieron espacios de diálogo y articulación con las organizaciones de la sociedad civil e institucionalidad interesada, identificamos y reconstruimos casos de estudio específicos en Colombia que reflejaron manifestaciones ocultas de la corrupción que han afectado de manera específica a estas dos poblaciones, y propiciamos conversaciones con las mujeres y personas con orientación sexual e identidad diversa que han sido directamente afectadas por estos hechos.
Estas posibilidades nos permitieron analizar la corrupción como un fenómeno que no solo afecta el erario público, la legitimidad y el sistema legal del Estado colombiano, ya que también vulnera profundamente la garantía de derechos, profundiza escenarios inequitativos y de discriminación, y facilita la reproducción de diferentes tipos de violencias basadas en género. De esta manera, el anterior hallazgo puso de manifiesto que el Estado y sus instituciones públicas no son las únicas víctimas directas de la corrupción; también las personas pueden sufrir daños individuales y colectivos que las convierten en víctimas de este fenómeno.
Ahora bien, a través de los testimonios y experiencias de las organizaciones de la sociedad civil interesadas, se fueron detectando contextos particulares que afectan de manera diferencial a las mujeres y personas con orientación sexual e identidades diversas; lo anterior debido a condiciones sociales, económicas y de género que las vuelven más vulnerables a sufrirlos[1]. Estos escenarios particulares se manifiestan, en primer lugar, a través de los periodos electorales, los cuales son aprovechados, por ejemplo, para generar violencias contra las mujeres en política a través de las candidaturas marginales[2] como una manifestación particular de la corrupción. También, se ha evidenciado la instrumentalización de liderazgos en el caso de las personas con orientación sexual e identidades diversas en diferentes espacios representativos y de elección popular, como una vía para cometer hechos asociados a la corrupción política[3].
En segundo lugar, las contrataciones irregulares y malas prácticas en el sector público se han convertido en un escenario que atenta profundamente contra el proyecto de vida y la garantía de derechos fundamentales, económicos, sociales y culturales. Y, en este sentido, la ausencia de un enfoque diferencial y de género en los procesos de contratación pública han conducido a una implementación deficiente de programas y estrategias diferenciales, operadores que en su ejercicio atentan con los derechos de las mujeres y personas con orientación sexual e identidades diversas, uso o desviación de recursos destinados a estas dos poblaciones, entre otros hechos.
En tercer lugar, la sextorsión o extorsión sexual es una manifestación de la corrupción poco abordada tanto jurídica como académicamente en Colombia. No obstante, esto no significa que sea un fenómeno inexistente en el territorio nacional. Las aproximaciones realizadas hasta el momento en TPC, reflejan que la naturalización de la sextorsión en el sector público y privado, han generado la invisibilización de patrones, la ausencia de investigaciones y sanciones jurídicas y la carencia de protocolos de prevención[4]. Asimismo, se estableció la existencia de factores limitantes para la denuncia de la corrupción que afectan de manera exclusiva o desproporcionada a las mujeres y personas de sectores LGBTIQ+[5].
Este abordaje nos permitió reconocer la oportunidad de avanzar y profundizar la lucha contra la corrupción y por la transparencia desde un enfoque de género y diversidad sexual e identitaria que permita superar las barreras y brechas de acceso a la justicia en materia de denuncia de la corrupción; hacer visibles los efectos concretos (individuales y colectivos) de la corrupción sobre personas de carne y hueso con rostros, trayectorias y proyectos de vida que son impactados de manera desproporcional a causa de una cultura patriarcal, heteronormativa y cissexista que permite, provoca, profundiza o naturaliza la corrupción y sus efectos sobre estas poblaciones; avanzar en el reconocimiento de los derechos a la reparación integral con garantías de no repetición por los daños causados por la corrupción; y, en ultimas, luchar por posicionar en la agenda pública la lucha contra la corrupción desde una perspectiva de género y diversidad sexual. Esto a partir de un compromiso y acción conjunta entre actores institucionales y de sociedad civil.
Finalmente, hemos abierto una puerta que permitirá levantar las banderas de la lucha anticorrupción, sintonizada con las agendas propias de las organizaciones de mujeres, organizaciones feministas, organizaciones trans, organizaciones de poblaciones con orientaciones sexuales e identitarias diversas; y evidenciando la estrecha relación que los efectos de la corrupción tienen en el reconocimiento, garantía y goce efectivo de los derechos de mujeres, niñas y población con orientación sexual o de género diversa. Que la lucha anticorrupción se desarrolle desde un enfoque de género y diversidad sexual se convierte en una tarea urgente y fundamental.
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[1] Ver: Corrupción, género y derechos humanos. En: https://transparenciacolombia.org.co/history/2021/11/30/corrupcion-genero-y-derechos-humanos/
[2] Ver el artículo: Las mujeres al poder: una necesidad democrática. En: https://transparenciacolombia.org.co/history/2022/02/03/las-mujeres-al-poder-una-necesidad-democratica/
[3] Concepto de corrupción política.
[4] Ver: Corrupción desde un enfoque de género: tres casos de estudio que abordan esta relación. En: https://transparenciacolombia.org.co/history/2021/11/30/corrupcion-desde-un-enfoque-de-genero/
[5] Ver: Los factores limitantes de la denuncia desde una perspectiva de género. En: https://transparenciacolombia.org.co/history/2021/11/30/los-factores-limitantes-de-la-denuncia
