Con frases como “que robe, pero que haga”, “cómo voy yo” o “el vivo vive del bobo”, normalizamos lo que jamás debimos aceptar: la corrupción.
Pero decidimos cambiar las cosas y creamos la campaña #SerCorruptoNoEsNormal con la que llevamos un mensaje de esperanza, acción y cambio. Aquí te mostramos lo que logramos juntos.
Desnormalizar la corrupción no ha sido una tarea sencilla, pero luego de año y medio de campaña, los resultados increíbles y esperanzadores que demuestran que sí es posible luchar para vivir en un país libre corrupción.
Pero esto no lo logramos solos, fue gracias al apoyo de nuestros 52 aliados, quienes nos ayudaron a hacer correr la voz de #SerCorruptoNoEsNormal:
En el evento conmemorativo de los 25 años de Transparencia por Colombia, se presentó la campaña #SerCorruptoNoEsNormal ante más de 200 actores clave en la lucha contra la corrupción, incluidos ciudadanía, líderes de opinión, empresarios, periodistas y directores de capítulos regionales de Transparency International, presentes en la IACC. Esta oportunidad nos permitió resaltar los hitos de la campaña, reforzando el mensaje central: la corrupción nunca debe ser justificada ni normalizada.
En el evento conmemorativo de los 25 años de Transparencia por Colombia, se presentó la campaña #SerCorruptoNoEsNormal ante más de 200 actores clave en la lucha contra la corrupción, incluidos ciudadanía, líderes de opinión, empresarios, periodistas y directores de capítulos regionales de Transparency International, presentes en la IACC. Esta oportunidad nos permitió resaltar los hitos de la campaña, reforzando el mensaje central: la corrupción nunca debe ser justificada ni normalizada.
En Medellín con 7 organizaciones salimos a “dar papaya” y abrir espacios de diálogo con la
ciudadanía. Juntos reflexionamos sobre el impacto de la corrupción y posibles acciones para
desnormalizarla y cambiar nuestros entornos.
Además, realizamos talleres de sensibilización con la Embajada de Suecia, Grupo Sura y Bancolombia para reflexionar sobre cómo la corrupción se normaliza en lo cotidiano y en el trabajo. A través de dilemas éticos, invitamos a sus equipos a cuestionar y cambiar esta realidad.
Creamos 25 Historias de Esperanza: relatos inspiradores de personas valientes que enfrentaron la corrupción y transformaron su entorno. Una nueva narrativa de unión y cambio, posible gracias al apoyo de periodistas, medios de comunicación y líderes sociales.